HOY HABLAREMOS DE OTRO TIPO DE GUÍA CANINO: EL DICTADOR.
Entre los dictadores podemos distinguir:
- Individuos con mentalidad propia de otra época, en la que tratar a los perros «a palos» era poco menos que habitual. Individuos de este perfil pueden aun encontrarse en algunas zonas rurales de nuestro país y en menor medida en grandes ciudades.
- Personas que optan por ser dictadores para así evitar convertirse en taxistas caninos.
- También hay algunos taxistas caninos que (tras leer algún libro o artículo en internet, ver algún programa de televisión o ser asesorados por algún «profesional») mutan a dictadores de sus perros.
Basándose en la premisa de que el perro es un animal jerárquico, los dictadores toman como dogma la idea de que el perro debe ser sumiso (por decreto). Así, viven obsesionados con mostrarse permanentemente como el macho alfa de sus manadas; no dudando en aplicar habitualmente severas técnicas de dominancia a sus perros, pensando que así los mantendrán bajo control.
El dictador no se plantea que muchas veces el problema no está en si su perro obedece o desobedece… sino más bien en si el perro entiende o no entiende. Este perfil de guía canino suele rechazar la idea de que los perros «piensen», y tampoco prestan mucha atención a los diferentes estados emocionales de sus perros durante los trabajos de educación y adiestramiento.
Alguien debería explicar a los dictadores que no es necesario someter a los perros para mostrarse ante ellos como un guía fuerte, sólido y justo. Ni el liderazgo ni el carisma se ganan a través del miedo o la tiranía.
El equipo de DOS adiestramiento.
